
Amigos blogueros... que todos disfruteis de una genial Nochevieja (cuidado con conducir bebido, POR FAVOR), y que el próximo año sea afortunado para todos. Un enorme abrazo.
Durante estas Navidades y con motivo de la Crisis, Zapatero lleva al parlamento una nueva ley:
Ayer noche leía RETRATO DE UN ASESINO de PATRICIA CORNWELL, y descubrí que Jack el Destripador, (sí, aquel asesino múltiple que en 1888 empezó a hacer de las suyas), y yo tenemos algo en común. Al parecer, con 120 años de existencia entre él y yo, ambos elegimos una misma cosa, un mismo seudónimo: Némesis. (¿Qué pensábais, eh?) En principio me ha sorprendido. Némesis, como ya sabéis es como una alegoría a la venganza justa, a la venganza en su justa medida. Pensando en ello, ¿de quién o de qué se vengaba Jack?, ¿qué es lo que le parecía justo?... ¿Matar todas aquellas mujeres?.
Que no podía alcanzar una erección y mucho menos lograr la penetración. Es posible que incluso debía sentarse para mear como las mujeres. De ahí, se cree, su odio hacia ellas en particular. De hecho, por aquel entonces aparecía una carta en la que un anónimo indicaba su opinión acerca del asesino: “Mi teoría sobre los crímenes es que el asesino ha sufrido una brutal desfiguración, posiblemente le hayan destrozado el miembro viril y ahora se esté vengando del sexo a través de estas atrocidades”. La carta la firmaba un tal “Scotus”, que, curiosamente, en inglés quiere decir corte ligero o superficial . A partir de ahí, multitud de coincidencias se suceden, innumerables datos y estadísticas y momentos documentados... que la gran mayoría de los de a pié no hemos leído en ningún sitio (yo, al menos).
Todavía estoy digiriendo lo de mi "disfunción de ATM", pero más relajada. Como comprobé en el post anterior, hay mucha gente igual, y por lo visto, antes de pasar por quirófano todavía hay cosas por hacer.
Hoy, hartita de tanta ropa mojada y tanta plancha (llueve, y es que no hay manera de secarla), me dije que iba siendo hora de terminar una tarea que ya había empezado hace una semana. Ha llegado el álbum de la boda (pero que guapísimos estamos, OS DEJO UNA FOTO DE MI ESTILASO ESE DÍA), y con él, el dvd y el cd con todas la fotos del evento. En esos días prometí a algunas personas que no podían venir, (y a alguno que dijo no poder venir)enviarles una fotografía. Ya había pedido las copias (carísimas), así que fui ensobrando y escribiendo una notita a unos, y a otros ya la postal navideña, porque están fuera del país y ya llega para entonces. Algunas debo entregarlas en mano, son gente mayor que decidió no venir por temas de salud. Y para más coña, todo el mundo quiere ver el dvd a la vez y andaremos como locos los proximos 3 fines de semana, teniendo en cuenta ya que este domingo tenemos un bautizo. El caso es que lo que más me espinaba y más tiempo me iba a llevar, lo dejé para el final: una fotografía a mi padre. No me la pidió, y de hecho me dijo que no fuera de Luna de Miel a su país, que los españoles no éramos bien recibidos y bla, bla, bla... supongo que temía que me presentara en su casa, para conocerlo (no tenía yo nada mejor que hacer en mí luna de miel, vamos). La cuestión es que no tenía claro que fotografía enviar, ni mucho menos qué poner. Si una al salir de la iglesia, si una del banquete, si una posando para el álbum, si alguna de las que se ve el mar por detrás... finalmente elegí 2 del banquete. Una dentro, en la celebración y otra fuera en el jardín de la bodega. Lo más probable es que las tire por allí en un cajón y nunca llegue a mencionar nada sobre ellas, pero bueno, yo se las echaré mañana en correos con una postal de navidad y una hojita cuartilla doblada dentro.